'El carro de las mulitas'; una tradición de más de 100 años que se mantiene viva en Metepec (VIDEO)
Don Mario López recorre comunidades con sus caballos Prieto, Capricho y la Colorada, ofreciendo transporte escolar y preservando una herencia familiar única.
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METEPEC, Estado de México.- En el Pueblo Mágico de Metepec, donde la modernidad avanza a paso firme, persiste una escena que remonta al pasado.
Don Mario López Escalante, a bordo de una carreta tirada por caballos, realiza diariamente recorridos por comunidades como San Lorenzo Coacalco y la colonia Álvaro Obregón, y ofrece un servicio de transporte escolar que ha sobrevivido por más de un siglo.
A sus 60 años, don Mario no solo transporta pasajeros, sino también historias, recuerdos y una tradición que comenzó con su abuelo y que ahora continúa él junto a sus fieles caballos: Prieto, Capricho y la Colorada.
Un servicio que conecta generaciones
El transporte, que alguna vez fue la parte trasera de una camioneta, ha sido adaptado con un sistema de frenos hidráulicos que controla la velocidad y protege a los caballos.
Don Mario, mientras se prepara para un día de trabajo, comenta sobre su historia.
“Esto data de bastantes años, más de 100, desde el papá de mi papá. Ya tenemos rato”.
Su servicio, disponible de lunes a viernes, tiene un costo de 10 pesos por persona.
“Varía la cantidad de pasajeros; hay días que se llena y otros que está medio vacío, pero más que nada es para las señoras, amas de casa y los niños que vienen de la escuela,” explica.
Don Mario guarda con orgullo anécdotas que muestran cómo su labor ha marcado generaciones, ahora quienes alguna vez se trasladaron con él, envían a sus hijas e hijos a la escuela; en los barrios de Metepec, todos lo conocen.
“He traído niños desde el kínder y ahora ya son licenciados o profesionistas. Incluso algunos que eran de Guadalajara, y hoy ya son licenciados. Eso es lo que le deja a uno satisfacción”.
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El cuidado de los caballos: “No ven la otra cara de la moneda”
Detrás del servicio, existe un compromiso especial con los animales. Don Mario aclara que sus caballos son tratados con respeto y cuidados específicos.
“No se maltrata a los animales. Mucha gente dice ‘Pobrecitos animales’, pero no ven la otra cara de la moneda, no saben lo que hay detrás del cuidado de estos animalitos,” señala, destacando la dedicación que requiere mantenerlos en buenas condiciones.
Los caballos Prieto, Capricho y la Colorada no solo recorren las comunidades, también participan en tradiciones locales. Cada año, forman parte del Paseo de San Isidro Labrador y otros eventos en el Valle de Toluca, donde se les reconoce como símbolos de una tradición viva.
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Una tradición que resiste al tiempo
En Metepec, el “carro de las mulitas”, como popularmente lo llaman, es más que un medio de transporte: es un legado familiar y cultural.
Don Mario recuerda que, hace años, eran 15 carros similares los que circulaban por la región cuando no existía el transporte convencional.
“La gente nos conoce así, aunque realmente son caballos, no mulitas,” comenta entre risas.
Actualmente, Prieto, Capricho y la Colorada continúan recorriendo las mismas rutas, “andantes y sonantes”, como los describe don Mario, y gracias a su dedicación, esta tradición centenaria sigue vigente en Metepec, conectando el pasado con el presente y recordando a sus habitantes la importancia de preservar sus raíces.
El legado; más que un transporte
La carreta de Don Mario no solo lleva pasajeros de un punto a otro; transporta historias, recuerdos y un sentido de identidad que pocas veces sobrevive al tiempo.
Mientras recorre las calles de Metepec con sus tres caballos, no solo presta un servicio, sino que mantiene una conexión cultural invaluable.
En un municipio donde la modernidad y las tradiciones coexisten, el “carro de las mulitas” es una muestra de que, a pesar del paso del tiempo, hay historias y oficios que merecen perdurar.