¿Quieres aprender a pintar retratos? Te decimos dónde y es gratis

TOLUCA, Estado de México.-  Un retrato es una representación de una persona en pintura, escultura, dibujo o fotografía, que describe la apariencia o el carácter del individuo representado, de acuerdo con expertos de la Universidad de Valladoli; en arte es una de las  técnicas más importantes de la pintura, ya lo largo de la historia ha representado el poder y el recuerdo de figuras representativas, el costumbrismo  de burgueses de épocas pasadas o bien figuras y estrellas internacionales en obras vanguardistas.

Por ello en el Estado de México, la Secretaría de Cultura y Turismo en coordinación con las autoridades de los museos han implementado programas que buscan enseñar a los ciudadanos escultura, pintura y otras actividades artísticas.   

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Museo del Retrato: Aprende a pintar en retrato

Como parte de las actividades culturales que se ofrecen en el Estado de México, a través del Museo del Retrato ' FelipeSantiagoGutiérrez' en Toluca, se brindan talleres para que quienes deseen aprender esta técnica lo hagan.

A través de sus redes sociales, se lanzó la convocatoria para participar en el taller “Pintura en Retrato” , que imparte el artista  Emiliano Lovera Gómez.

Lugar y horario

• Sábados 19 y  26 de octubre
• De 10:00 a 14:00 horas

El requisito es que tengas de 15 años en adelante.

Material necesario para taller 'Pintura en retrato'

• Libreta
• Lápices
• Pinturas al óleo
• Disolvente
• Destinatario
• Godete
• Pinceles
• Trapo

Origen del retrato

De acuerdo con expertos en historia del arte, el retrato como expresión artística surgió en el Siglo V aC cuando las monedas persas, apareció con la cara tallada de los reyes fue el inicio de su origen y posteriormente, esta tendencia fue popularizada entre otras por Alejandro Magno; se difundió todavía más tras su muerte. 

Fue en la cultura egipcia que cobró mayor importancia, especialmente en el ámbito funerario y fue pasando por distinatas épocas y países hasta que en Grecia el retrato fisionómico, que representaba la divinidad, se hizo especialmente relevante en conjunto con una evolución hasta representaciones fieles de rasgos somáticos y la espiritualidad de los individuos.